Cirugía de la epilepsia
Vivir con ataques epilépticos puede ser debilitante y agotador, especialmente cuando los medicamentos no pueden controlarlos. En Providence, nos tomamos el tiempo para comprender sus convulsiones. Encontramos el mejor tratamiento quirúrgico para prevenir o reducir tus convulsiones para que puedas disfrutar de una buena calidad de vida.
Nuestro equipo trata los tipos de epilepsia más complejos que no responden a otros tratamientos o que no pueden tratarse con la cirugía de epilepsia tradicional. Las condiciones incluyen:
- epilepsia compleja
- Epilepsia médicamente resistente
- Epilepsia del lóbulo no temporal
- Epilepsia del lóbulo temporal
Usted y su equipo de atención trabajan juntos para decidir si la cirugía de epilepsia es adecuada para usted. Realizamos varias pruebas como parte de este proceso y utilizamos los resultados de sus pruebas para comprender a fondo sus convulsiones. Los objetivos de las pruebas incluyen:
- Identificar si una o más áreas de su cerebro causan convulsiones
- Decidir si el área se puede extirpar de manera segura
- Determinar el mejor enfoque de tratamiento
Usamos tecnología avanzada para obtener información crítica sobre sus convulsiones. Estos datos ayudan a su equipo de atención a elegir el tratamiento más preciso para usted. Algunas pruebas no son invasivas y se pueden realizar de forma ambulatoria. Otros requieren cirugía hospitalaria.
Sus pruebas pueden incluir:
- Prueba de tomografía computarizada (TC)
- Mapeo cortical
- Resonancia magnética funcional (IRM)
- Resonancia magnética de alta resolución del cerebro
- Monitoreo de convulsiones invasivas (rejilla y electrodos de profundidad)
- Videoelectroencefalograma (EEG) de larga duración en una unidad de monitorización de epilepsia
- Tomografía por emisión de positrones (TEP)
- Pruebas de Wada
Si sus convulsiones comienzan en un área de su cerebro, una cirugía abierta llamada craneotomía o cirugía láser estereotáctica puede ser una buena opción.
Si sus convulsiones comienzan en múltiples áreas de su cerebro, están demasiado cerca de estructuras neurológicas importantes o no podemos identificar un punto desencadenante, hay otras opciones de tratamiento disponibles, como un procedimiento de Neuropac o estimulación del nervio vago.
Una craneotomía es una cirugía cerebral abierta que se realiza bajo anestesia general. Su neurocirujano:
- Crea un plan preoperatorio usando resonancias magnéticas de su cerebro
- Elimina parte de su cráneo para exponer el cerebro
- Utiliza la navegación por computadora basada en sus exploraciones de resonancia magnética para ubicar el área precisa del tejido cerebral para extirpar
- Puede usar pruebas durante la cirugía como la estimulación de la corteza cerebral para evitar dañar los centros motores o del lenguaje en el cerebro.
- Elimina el tejido cerebral donde comienzan las convulsiones.
- Reemplaza la parte del cráneo con placas y tornillos.
- Cierra el cuero cabelludo con suturas
Después de cirugía:
- Te recuperas en el hospital de dos a cinco días.
- Lo monitoreamos para detectar cualquier efecto secundario o convulsiones.
- Continúa tomando sus medicamentos anticonvulsivos
- Ve a su equipo de atención para citas regulares de seguimiento
Si sus convulsiones se localizan en un área de inicio o están lejos de áreas de función cerebral importante, la ablación con láser estereotáctico puede ser el tratamiento adecuado para usted.
Realizamos este procedimiento mínimamente invasivo bajo anestesia general. Su cirujano:
- Hace una incisión de media pulgada en el cuero cabelludo
- Perfora un pequeño agujero a través del cráneo.
- Pasa una sonda láser de fibra óptica a través del orificio para llegar al área objetivo de su cerebro
- Utiliza el láser para quemar selectivamente el tejido cerebral que causa las convulsiones.
- Utiliza una resonancia magnética intraoperatoria para guiar con precisión el láser y ver lo que sucede dentro de su cerebro en tiempo real.
- Puede repetir la quema del láser desde diferentes ángulos para lograr la ablación completa de un área objetivo más compleja
- Elimina el láser y cierra la incisión en el cuero cabelludo con un solo punto
Después de cirugía:
- Te monitoreamos en el hospital después de la cirugía.
- Regresa a casa al día siguiente de la cirugía.
- Continúa tomando sus medicamentos para la epilepsia.
- Ve a su neurocirujano y neurólogo para citas regulares de seguimiento.
Si sus convulsiones comienzan en múltiples áreas o comienzan en un tejido importante para el funcionamiento normal del cerebro, la cirugía Neuropac puede ser una opción para usted.
Neuropace utiliza electrodos y un dispositivo neuroestimulador receptivo para monitorear sus ondas cerebrales y responder a actividades inusuales que pueden provocar una convulsión. El dispositivo envía pulsos eléctricos cortos para detener la actividad anormal. Esto suele ocurrir antes de que sienta los síntomas de las convulsiones.
Realizamos la implantación de Neuropac bajo anestesia general. Su cirujano:
- Hace una incisión en el cuero cabelludo donde se implantará el neuroestimulador
- Se extrae un trozo de cráneo para alojar el neuroestimulador
- Hace pequeñas incisiones separadas en los lugares donde los electrodos entrarán en el cerebro a través del cráneo.
- Coloca con precisión los electrodos para reconocer y responder mejor a la actividad convulsiva.
- Canaliza los cables de los electrodos debajo de la piel del cuero cabelludo hasta el neuroestimulador
- Conecta los electrodos al dispositivo neuroestimulador
- Cierra las incisiones con suturas y grapas.
Después de cirugía:
- Te monitoreamos en el hospital después de la cirugía
- Vuelves a casa el día después de la cirugía.
- Continúa tomando sus medicamentos para la epilepsia
- Ve a su neurocirujano y neurólogo para citas regulares de seguimiento
- Su dispositivo registra sus convulsiones durante varias semanas.
- Su neurólogo ajusta el dispositivo para reconocer y responder a sus convulsiones
- Sus convulsiones comienzan a mejorar unos meses después de la cirugía a medida que el dispositivo aprende a responder a su actividad cerebral.
Para muchos pacientes, Neuropace reduce las convulsiones y mejora la función cognitiva, la calidad de vida y el estado de ánimo. El dispositivo no causa efectos secundarios como muchos medicamentos anticonvulsivos, como deterioro cognitivo, mareos o somnolencia.
La estimulación del nervio vago previene las convulsiones al enviar pulsos regulares de energía eléctrica al cerebro a través del nervio vago. La estimulación del nervio vago utiliza un neuroestimulador (como un marcapasos cardíaco) implantado debajo de la piel de su pecho y un electrodo que se conecta al nervio vago en su cuello.
Realizamos cirugía de estimulación del nervio vago bajo anestesia general. El procedimiento toma alrededor 90 minutos.
Su cirujano:
- Hace una incisión en el pecho izquierdo cerca de la clavícula para colocar el neuroestimulador
- Hace una segunda incisión en el lado izquierdo del cuello
- Separa el nervio vago de las estructuras circundantes.
- Enrolla el electrodo alrededor del nervio vago y lo asegura en su lugar
- Pasa los cables de los electrodos por debajo de la piel hasta la incisión del tórax y los conecta al neuroestimulador
- Cierra ambas incisiones con suturas y pegamento quirúrgico.
Después de cirugía:
- Regresa a casa los mismos días de su cirugía.
- Su neurólogo activa el estimulador dos o tres semanas después en una cita de seguimiento.
- Su neurólogo:
- Determina la fuerza adecuada y el momento de los impulsos para satisfacer sus necesidades.
- Programa los ajustes con una varilla que se coloca sobre la piel donde se implanta el neuroestimulador.
Si es necesario, puede activar su dispositivo con un imán especial para enviar una estimulación si experimenta síntomas previos a la convulsión, como auras. Esto puede detener la convulsión.
La batería del estimulador dura unos cinco años. Su médico puede reemplazarlo durante un breve procedimiento quirúrgico ambulatorio.
Médicos Especialistas en Cirugía de Epilepsia
En Providence, usted tendrá acceso a una amplia red de médicos dedicados y compasivos que ofrecen atención personalizada y se centran en el tratamiento, la prevención y la educación sobre la salud.