Ecografía abdominal
Una ecografía abdominal, a veces llamada sonograma abdominal, es una técnica de diagnóstico por imágenes que utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para crear una imagen de sus órganos internos.
Con la ecografía, su médico puede evaluar el flujo sanguíneo abdominal a través de varios vasos y el estado general de algunos de sus órganos más vitales, como el hígado, el bazo, la vesícula biliar y los riñones.
Cada ultrasonido abdominal, examen y sonograma tienen como objetivo brindar a sus médicos la capacidad de detectar, diagnosticar y tratar cualquier afección que pueda afectar su región abdominal. Éstos incluyen:
- coágulos de sangre
- cálculos biliares
- Cálculos renales
- Función hepática anormal
- Cáncer de hígado
- Tumores en la zona abdominal
Junto con la ecografía abdominal estándar, también realizamos pruebas de detección de aneurismas aórticos abdominales (AAA) como parte de nuestras pruebas de detección de salud vascular y cardíaca. La detección AAA es una prueba no invasiva similar a una ecografía abdominal estándar, pero diseñada para detectar el debilitamiento y la inflamación de la aorta abdominal, una sección de la arteria más vital del cuerpo humano.
Muchos lugares también ofrecen una ultrasonido transabdominal, diseñado específicamente para crear imágenes del páncreas. Su médico puede usar estas imágenes para determinar el tamaño, la ubicación y la propagación de los tumores en el páncreas, así como la pancreatitis.
Durante su ultrasonido abdominal, su médico le pedirá que use una bata de hospital y se acueste en una mesa de examen. Según el tipo de ecografía o los órganos a los que se dirige la imagen, se acostará boca arriba o de costado, con el abdomen (vientre) expuesto.
Debido a que una ecografía utiliza ondas de sonido para crear imágenes, se frota suavemente un gel sobre la piel para suavizarla y eliminar cualquier partícula de aire que pueda interferir con los resultados de la ecografía.
Una vez que se ha aplicado el gel, se frota alrededor del abdomen una pequeña sonda Doppler llamada transductor. La sonda envía ondas de sonido ultrasónicas a diferentes áreas de su abdomen. Estas ondas luego son rebotadas por diferentes órganos. Esas ondas de sonido reflejadas son tomadas por la máquina de sonograma y procesadas electrónicamente para producir imágenes en vivo de los órganos internos mientras funcionan.
La ecografía abdominal completa no lleva más de 30 minutos y es libre de dolor. Su ecografista está disponible durante todo el proceso para responder preguntas y asegurarse de que su experiencia de detección sea fluida y cómoda.
La ecografía abdominal no tiene riesgos. Es un procedimiento no invasivo que no requiere radiación para obtener imágenes de sus órganos como lo haría una radiografía.
La única complicación posible involucra condiciones preexistentes que podrían afectar los resultados de su ultrasonido. Ciertas condiciones de salud, como gases intestinales y obesidad severa, pueden afectar la forma en que la máquina de ecografía interpreta las ondas de sonido que produce. Estos pueden alterar los resultados de la ecografía abdominal. Asegúrese de consultar a su médico si sufre de afecciones que puedan afectar su evaluación.