Ductografía
Si tiene secreción anormal del pezón, es probable que su médico le recomiende un ductograma. A diferencia de los procedimientos de imágenes alternativos, un ductograma puede ayudar a encontrar la causa de la descarga con un mayor nivel de precisión.
La ductografía, también llamada galactografía, es un procedimiento de diagnóstico por imágenes que se usa para determinar la causa de la secreción anormal del pezón. A menudo se usa para diagnosticar mujeres con secreción espontánea clara o con sangre del pezón de un seno.
Un ductograma toma aproximadamente 30 para 60 minutos y se realiza como un procedimiento de imagen ambulatorio. La ductografía utiliza la misma tecnología que una mamografía.
Durante el procedimiento, se inserta una pequeña cánula (tubo delgado) con una punta roma en el conducto problemático a través del pezón.
La cánula inyecta suavemente una pequeña cantidad de líquido radiopaco, también llamado líquido de contraste, en el conducto. El líquido delinea el interior del conducto y ayuda a su médico a ver pequeños crecimientos en el seno a través de una radiografía.
Estos crecimientos son a menudo la causa de una secreción anormal del pezón. Si bien los crecimientos suelen ser benignos (no cancerosos), generalmente se eliminan, lo que permite un diagnóstico definitivo y cura la secreción.
Aunque es muy poco común, existen riesgos leves para una prueba de ductografía. Éstos incluyen:
- Lesión menor en el conducto.
- Exposición mínima a la radiación
- Infección