Hay muchas maneras efectivas de tratar el dolor de cuello y espalda sin cirugía. Puede estar seguro de que su equipo de atención de la columna siempre comenzará con el plan de atención más conservador para usted. Su equipo analizará sus opciones de tratamiento, que pueden incluir cualquiera de las siguientes.

• Terapia física –Un fisioterapeuta trabajará con usted para crear un plan de ejercicios que apunte a esos músculos y lo ayude a recuperar la fuerza y el rango de movimiento.
• fisiatría – Un fisiatra es un médico con formación especializada en medicina física y rehabilitación. Se enfocan en todo su cuerpo y recomiendan tratamientos que aborden sus síntomas. 
• Gestión de medicamentos – Los medicamentos, como los antiinflamatorios y los analgésicos no narcóticos, pueden ayudarlo a controlar mejor sus síntomas y mantenerlo en movimiento.
• Terapias de inyección –Las inyecciones son un método mínimamente invasivo para el cuidado de la columna vertebral que puede proporcionar un tratamiento duradero.
• Cambios en la dieta – Una dieta saludable (y que evite las grasas trans, los azúcares refinados y los alimentos procesados) puede ayudar a reducir la inflamación y mantener un peso saludable.
• Ejercicio – El ejercicio de bajo impacto, como nadar, andar en bicicleta o yoga, puede ayudarlo a ganar fuerza y mejorar la flexibilidad, y reducir el dolor de espalda o cuello. 
• Modificaciones de estilo de vida – Su médico también puede analizar modificaciones en el estilo de vida que pueden ayudar a reducir el dolor de espalda o cuello.
• Terapias alternativas – A veces, las terapias alternativas como la acupuntura, los masajes, la terapia de biorretroalimentación o la estimulación nerviosa eléctrica pueden ayudar a reducir el dolor de espalda o cuello. 

Si los tratamientos no quirúrgicos no alivian su dolor, su equipo puede recomendarle una cirugía de columna. Afortunadamente, los avances en neurocirugía significan que existen más enfoques quirúrgicos mínimamente invasivos para el dolor de cuello y espalda que nunca. En muchos casos, estos procedimientos usan tecnología para guiar con precisión los movimientos de su cirujano, lo que significa incisiones más pequeñas y tiempos de recuperación más cortos.

Nuestros cirujanos de columna tienen experiencia en muchos procedimientos, que incluyen:

• Descompresión espinal – La cirugía de descompresión puede ayudar a aliviar el dolor de espalda. Hay muchos tipos diferentes de cirugía de descompresión:
  • Laminectomía: se extirpa una o más vértebras laminares
  • Laminotomía: se extrae una pequeña porción de la lámina.
  • Foraminotomía: se agranda el área alrededor de la vértebra afectada
  • Microdiscectomía: se extrae una porción de un disco herniado a través de una pequeña incisión durante un procedimiento mínimamente invasivo.
• Cirugía de reemplazo de disco – Su cirujano reemplazará un disco dañado por uno artificial. Esto ayuda a reducir el dolor y mejorar el rango de movimiento.
• cifoplastia – Un procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo, la cifoplastia puede ayudar a tratar las fracturas por compresión de la columna causadas por la osteoporosis.
• Procedimientos mínimamente invasivos
• Fusión espinal – La fusión espinal une (fusiona) de forma permanente dos o más vértebras. Esto ayuda a reducir la inestabilidad, mejorar el rango de movimiento y aliviar el dolor. Se usa para tratar muchas afecciones, como la estenosis espinal, la enfermedad degenerativa del disco, la escoliosis y otras.
• Cirugía de reconstrucción de columna – Este procedimiento avanzado reemplaza las partes deformadas o desalineadas de la columna vertebral con discos y hardware artificiales. Esto ayuda a alinear y estabilizar la columna vertebral, lo que mejora la movilidad y la calidad de vida.
• Vertebroplastia (quiftoplastia): un cirujano insertará una mezcla especial de cemento en la vértebra fracturada para ayudar a aliviar el dolor y mejorar su movilidad.